Como consultor en marketing político diseñé la campaña "1,2,3 por Marko Cortés", que tuvo como objetivo dar a conocer las tres principales acciones del Senador por Michoacán en el contexto de su cuarto informe de labores de acuerdo al marco jurídico vigente. Uno: anuncia las unidades móviles que tiene el senador en el estado dando servicio médico gratuito. Dos: a partir del año que entra se termina el impuesto a la tenencia vehicular a nivel federal, como se prometió en la campaña de 2006. Tres: Marko cambió la forma de hacer política recorriendo la totalidad del estado par estar en contacto co la gente. Durante el tiempo legal establecido, se emitieron spots de radio, televisión, así como entregas mano en mano del informe impreso del legislador. La campaña logró un grado importante de posicionamiento en todo Michoacán por la rima y por la sencillez del concepto. Hasta ahí se cumplían los objetivos. Pero en los últimos días se lanzó una campaña mediática en contra del 1,2,3, diciendo (sin un solo argumento jurídico) que se están violando 18 artículos de diversas leyes federales y locales. Absolutamente no hay ninguna violación a ninguna ley pues baste decir que de haber habido alguna anomalía, los medios de comunicación no hubieran aceptado vender espacios publicitarios al 1,2,3 pues se harían acreedores a sanciones. Sin embargo, la discusión jurídica no es el punto de esta columna ni tampoco la razón de lanzar una campaña negra en contra del legislador michoacano. La razón de fondo de los ataques es que Marko se perfila como la carta más fuerte para conseguir la candidatura del PAN para gubernatura de Michoacán. Las agresiones mediáticas lo confirman, pues "el que nada debe, nada teme". Por tanto, sólo tengo un profundo agradecimiento con quienes nos ayudaron a darle eco al 1,2,3 pues nuestro presupuesto no ajustaba para contratar tantos espacios en radio, mucho menos para inserciones en diarios, ni banners en agencias de noticias que seguramente rebasaron los cientos de miles de pesos. ¿Por cierto, de dónde salió el dinero para pagarlas? Los expertos en posicionar conceptos en la opinión pública tienen claro que para que una idea pueda ocupar un espacio en la mente de la gente (tan saturada con publicidad de todo tipo y tan ocupada en los temas cotidianos), se necesita que sea un hecho extraordinario y que logre sobresalir de lo común. La campaña original por si sola lo lograba, pero la notoriedad ante la opinión pública de Michoacán e incluso local se ha dado irónicamente gracias a la contracampaña. Quienes vieron la película del Crimen del Padre Amaro saben que no fue una gran cinta; quienes fueron al cine a ver Presunto Culpable saben que fue un documental que refleja la perversa situación del sistema de justicia en México pero que no es la mejor opción para una tarde de película. En ambos casos nunca se hubiera alcanzado el nivel de notoriedad y en consecuencia de venta de taquilla si no hubiera sido por la campaña de ataque de las que fueron victimas.
Por eso insisto: muchas gracias.
A mi me parece que si hubieses violado alguna de las 15000 leyes que decía el otro comercial lo hubieran censurado, el detalle esta en porque no censuraron el otro si había cierta difamación hacia la muy buena campaña de un trabajo no tan bueno de Marko.
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